Por tener, tiene hasta 7 faros, estratégicamente situados, con la vuelta a la isla que os ofrecemos, los veremos todos.

Empezaremos por el primero, el de Ciutadella, donde llegaremos habiendo recorrido las 113Nm que lo separan del Port Marina Badalona. Se trata del segundo núcleo urbano de la isla de Menorca, y su antigua capital hasta 1714, cuando los ingleses le dieron la capitalidad a Mahón, que todavía hoy ostenta. Su puerto, donde amarraríamos, está considerado como uno de los más bonitos del Mediterráneo.

Muy cerca de la población ya se encuentran playas de gran belleza. Llegaremos en velero, fondearemos y nos podremos bañar en lugares como Cala’n Bosch, Cala Turqueta, Cala Macarella o Cala Macarelleta. Preciosas playas de aguas color turquesa y arenas blancas y finas. Por la zona divisaremos el segundo faro, el del Cap d’Andrutx.

 Seguiremos por el sur de la isla, pasando por Cala Galdana y Cala Trebalúger, una cala de difícil acceso a pie y que hace que no esté muy poblada. De allí, Cala Escorxada y la más extensa, la de Son Bou, con casi 3 kms de largo. Fondearemos donde nos apetezca y crea el capitán, ya sea en Cala Coves, o Beniparratx, o quizás Cala’n Porter, con sus blancas casas situadas en medio de la roca. Allí se encuentra la famosa Cova d’en Xoroi. Y muy cerca Binibequer, uno de los pueblos más bonitos de Menorca.

Nos preparamos para descubrir el tercer faro, el de la Isla del Aire. La isla recibe ese nombre por los fuertes vientos que en ella soplan, como la Tramontana. Si ellos nos dejan, cruzaremos entre la isla y Punta Prima y empezamos a subir por el lateral oriental de la isla hacia su capital, Mahón. Allí hay un cuarto faro, el de Punta de San Carles.

Mahón tiene uno de los puertos naturales más grandes del mundo, con más de 5kms y sólo por ello ya merece una parada en el camino. Por ello y por pasear por su centro histórico y probar el famoso Gin Xoriguer o una tapita del queso de Mahón.

Continuaremos navegando hacia el norte, dejaremos a la izquierda el Parque Natural de S’Albufera des Grau, y Cala Tortuga, hacia el Cabo de Favàritx, en el extremo noreste de la isla, donde veremos el quinto faro, el de Favàritx.

Y de allí a Fornells, famoso, entre otras cosas, por su caldereta de langosta. Cerca está Cabo Caballeria, con el sexto faro.

Las calas que aquí nos encontramos son abruptas, salvajes, con acantilados que mueren directamente en el mar: Cala Pilar, Cala Pregonda o Cala Morell hasta llegar al extremo noroeste, con el faro Nati, construido en 1912 para evitar los constantes naufragios que se producían en la costa norte de Ciutadella. Es uno de los lugares más privilegiados para contemplar la puesta de sol, aunque podemos avanzar un poco más al sur hasta llegar a Pont d’en Gil, el preferido por mucha gente.

Y de aquí a Ciutadella, un paseo. De nuevo en esta población, nos prepararemos para ya iniciar el regreso a Port Marina Badalona, donde tenemos prevista la llegada sobre las 18:00h del 8º día.